La biotecnología, en general, abarca el estudio de sistemas o procesos biológicos, aportando la biotecnología a campos como la medicina, el sector agrícola, y la inteligencia artificial, entre otros. 

En la biotecnología ambiental, los procesos biotecnológicos son trabajados normalmente por ingenieros y su objetivo es diseñar y estudiar los procesos que ocurren, para ser un aporte a la mejora del medioambiente.

En la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Concepción, algunos estudios se realizan en el laboratorio de Bioingeniería, del Departamento de Ingeniería Química, donde se trabaja específicamente el área ambiental; así es como lo indica la docente Marlene Roeckel, quien ha realizado distintos proyectos en biotecnología ambiental y ha sido protagonista reconocida en esta materia. Su relato inicia de la siguiente manera:

“En nuestro laboratorio de Bioingeniería se trabaja en biotecnología ambiental. Por ejemplo, se realizó un proyecto que logró recuperar la costa roja de la Bahía de Concepción, desarrollando procesos para descontaminar la bahía. Cuando se trabaja con sistemas biológicos, el proceso es siempre natural y, denominado “verde”, pues a diferencia de muchos procesos químicos, que son procesos a altas temperaturas o catalíticos, y donde frecuentemente se producen residuos químicos, en este caso, no se produce contaminación y se trabaja a temperaturas moderadas.”

Así como lo aclara la experta, en la biotecnología ambiental se trabaja generalmente a temperaturas cercanas al ambiente; y si bien se trabaja con temperatura bajas en que los procesos son más lentos, se tiene la seguridad de que son procesos naturales y ecológicamente sostenibles. Finalmente, sus beneficios son: “eliminar  residuos, abatir contaminantes, recuperar materia orgánica y ahorrar agua a través de diversos sistemas biológicos. Incluso, se utilizan vegetales para descontaminar, mejorando el bienestar de las personas y el impacto sobre las comunidades, entre otros” aclaró Marlene.

Los trabajos señalados anteriormente son los que se desarrollan en el laboratorio de Bioingeniería del Departamento de Ingeniería Química de la Facultad de Ingeniería UdeC, donde se investigan y aplican distintos proyectos.

“En nuestro laboratorio hemos trabajado desde esa mirada: eliminar, abatir, reciclar y ahorrar. Al comienzo, analizando los desechos de la industria pesquera se diseñaron procesos para descontaminar; no se aplicaron todos, pero se cumplió de todas formas la función de limpiar la costa. La industria pesquera tenía un problema grave en Concepción porque se vertían desechos de pescado y a medida que un cuerpo de agua se va contaminando, la capacidad de albergar vida diversa agua se va reduciendo; entonces, cuando se descontamina, esto mejora.”

La docente experta recuerda lo ocurrido en la costa como un hito, por la magnitud del problema que era tener una bahía roja en la ciudad; sin embargo, el trabajo en biotecnología ambiental ha continuado persistentemente y se materializa en otros proyectos.

“Ahora hicimos algo parecido, para desarrollar un proceso para tratar las excretas de aves; éstas son muy contaminantes porque el amoniaco penetra a las capas de la tierra. Entonces, desarrollamos un proceso para eliminar el amoniaco y hacer un reciclo que al mismo tiempo ahorrará agua. Este proceso está cerca de ser adoptado por una empresa.”

Luego, la académica nombró otro de los proyectos similares que trata sobre los lixiviados de residuos de rellenos sanitarios, en el que han trabajado varios años ya que en este caso,  luego de estudios, pruebas y evaluaciones, lograron encontrar un tratamiento más eficiente e integral que el utilizado actualmente por las empresas del rubro.

Finalmente, comparte sobre los últimos proyectos en los que han estado embarcados y que fue solicitado por la empresa Biodiversa. “Se trata de valorizar el lodo del tratamiento de vertidos domiciliarios, porque existen dificultades con la disposición y tratamiento del lodo residual proveniente del tratamiento aeróbico. Interesa, en este caso, utilizarlo para a recuperar metales valiosos, como el cobre o lantánidos.”

Sin duda, el trabajo nombrado anteriormente es crucial para el mejoramiento medioambiental, pues permite una valorización de residuos.

Les invitamos a estar atentos a las siguientes publicaciones para conocer, próximamente en detalle los proyectos mencionados.